A muchos nos encantaría poder crear personajes en 3D, imaginados y modelados por nosotros mismos, sin embargo, esto resulta más complicado de lo que parece. Para empezar, debemos desarrollar un "instinto" de profundidad y distribución del espacio, el efecto y uso de luces y sombras, así como la concepción de volúmenes. La idealización en tercera dimensión, es un factor que debe ejercitarse, pues trabajamos en diferentes planos a la vez, diferentes vistas y perspectivas que van más allá de un trazo en un plano o una simple proyección. Para esto, en 3D Max, estaremos a cargo de 3 vistas, las cuales nos permitirán manipular los objetos dentro de un determinado espacio:
Una de las ventajas de 3D Max es que puede generar objetos básicos y otros no tan básicos que pueden modelarse para generar formas más complejas, con el uso de boleanas y otras herramientas. Como mencioné hace un par de lineas, cada una de las vistas permite tener una referencia de orientación y posición de los objetos en el espacio. Cada figura puede dotarse no solo de volumen si no también de iluminación y textura para acrecentar el grado de realismo, así como modificar su tamaño y colocación.
Muchas de las herramientas nos permiten manipular cada objeto, rotarlo, escalarlo y moverlo, así como maniobrar entre los planos. Esto es literalmente, la base de la base de la base de las bases. Tal vez algún día con mucha práctica, algo de suerte y por supuesto, predisposición genética para el modelado, podamos hacer algo así:
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